Madrid, Enero 2005
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VIPERA LATASTEI ABULENSIS – una nueva subespecie de vipérido de la Cordillera Central en la Península Ibérica - datos comparativos con la subespecie nominal Vipera latastei latastei.

Autores: Juan Timms Rangel & Raúl Doblado Regaño

Abstracto. Se describe una nueva subespecie, Vipera latastei abulensis, de la vertiente
norte de la Sierra de Gredos en la Península Ibérica. Difiere de la subespecie nominal
en el número de escamas ventrales y en diversos aspectos morfológicos externos.


Vipera latastei latastei (Boscá, 1878) se extiende por toda la Península Ibérica exceptuando el extremo norte. La subespecie Vipera latastei gaditana (Saint Girons, 1977) se distribuye por el suroeste de la Península Ibérica y norte de Africa (Marruecos, Argelia y Túnez). La línea divisoria entre V. l. latastei y V. l. gaditana en el sur de la Península no está claramente definida y existen ejemplares provenientes de zonas intermedias que presentan conjuntamente caracteres de ambas subespecies.
Vipera latastei latastei se distribuye de forma discontinua por la Península Ibérica restringiéndose a las zonas colinares y de montaña, evitando las praderas bajas y dehesas. Esta condición ha dado lugar a poblaciones aisladas entre sí con las consiguientes variaciones morfológicas. Las variaciones observadas en ejemplares obtenidos de la vertiente norte de la Sierra de Gredos rebasan los parámetros conocidos para la especie y por lo tanto proponemos su clasificación como subespecie: Vipera latastei abulensis.

Etimología: el nombre subespecífico abulensis (Lat.) deriva del gentilicio Abulense; Natural de Ávila.

Material y Métodos: Se han estudiado un total de 165 ejemplares de víbora hocicuda; 93 pertenecientes a la forma nominal; 46 pertenecientes a la nueva subespecie propuesta (incluido el holotipo); y 26 pertenecientes a la subespecie V. l. gaditana. Se ha contabilizado el número de escamas dorsales, ventrales y subcaudales de cada ejemplar. También se ha investigado la presencia o ausencia de placa frontal y/o parietales en cada ejemplar, así como diferencias en patrones de coloración y forma y disposición de la banda dorsal o zig-zag.

Descripción del holotipo: Macho adulto de Gredos (Ávila). Longitud total 625 mm. Longitud de la cola 100 mm (16 %). Punta de la cola negra – subcaudales 3ª a 30ª amarillas, resto negras. Cabeza: ancho 17 mm, largo 27 mm. Presenta 10 escamas supralabiales; 12 infralabiales; 3 apicales; 2 cantales; 2 hileras de escamas entre ojo y labiales; 11 circumoculares; 14 intercantales y 4 intersupraoculares. Escama frontal sin fragmentar. Presenta 21 dorsales; 145 ventrales y 46 subcaudales. Coloración de fondo gris amarillento. Banda dorsal ondulada de color negro intenso. Ocelos laterales negros muy marcados. Vientre blanco con moteado negro muy fino más concentrado en el centro. Número de ondulaciones de la banda dorsal (desde la nuca hasta la base de la cola): 50

Vipera latastei abulensis

Una nueva subespecie de Vipera latastei aislada geográficamente de la subespecie nominal por la ausencia de hábitat adecuado, se distribuye por encima de los 1000 mts sobre el nivel del mar y se caracteriza por presentar de forma consistente un elevado número de escamas ventrales; escama frontal sin fragmentar y a veces parietales; una banda dorsal gruesa y ondulada.

Esta nueva subespecie difiere de la subespecie nominal en varios aspectos:

1. Presenta un elevado número de escamas ventrales; 143.8 de media para los machos y 144.3 en las hembras frente a una media de 135.8 (machos) y 136.7 (hembras) para ejemplares de V. latastei latastei obtenidos de diversas regiones de la Península Ibérica. La media de escamas ventrales obtenida para V. l. gaditana es de 131.5 (machos) y 133.2 (hembras). Estos resultados se han obtenido después de analizar 165 ejemplares de víbora hocicuda:

- 23 machos de V. l. abulensis, con número de ventrales de 140 a 149, procedentes de Avila.
- 23 hembras de V. l. abulensis con ventrales de 140 a 148, procedentes de Avila.
- 40 machos de V. l. latastei con ventrales de 130 a 140, procedentes de 29 provincias distintas de la Península Ibérica.
- 53 hembras de V. l. latastei con ventrales de 129 a 142, procedentes de 29 provincias distintas de la Península Ibérica.
- 14 machos de V. l. gaditana con ventrales de 130 a 134, procedentes de Huelva, Sevilla y Jaén.
- 12 hembras de V. l. gaditana con ventrales de 133 a 134, procedentes de Huelva, Sevilla y Jaén.

En el recuento de escamas subcaudales no se aprecian diferencias notables entre las distintas subespecies. Los resultados obtenidos son los siguientes:

- V. l. abulensis (machos): (x = 42) siendo x la media, con un rango de 38 – 46
- V. l. abulensis (hembras): (x = 36) con un rango de 31 – 40
- V. l. latastei (machos): (x = 41.2) con un rango de 35 – 45
- V. l. latastei (hembras): (x = 33.5) con un rango de 30 – 40
- V. l. gaditana (machos): (x = 42.2) con un rango de 40 – 45
- V. l. gaditana (hembras): (x = 36.5) con un rango de 35 – 39

El número de escamas dorsales es de 21 para todos los ejemplares de las tres subespecies salvo en el caso de cuatro machos de V. l. abulensis, tres de los cuales presentan 19 y el cuarto presenta 23.

2. En V. l. latastei el dibujo dorsal o zigzag generalmente tiene bordes angulosos y tiene un grosor medio de 7-8 escamas dorsales, mientras que en V. l. abulensis predominan los ejemplares con zigzag con los bordes redondeados y un grosor medio de 9-10 escamas dorsales. Además, el número de ondulaciones o picos en el dibujo dorsal (desde la nuca hasta la base de la cola) es mayor en V. l. abulensis (x = 43) que en V. l. latastei (x =38) y que en V. l. gaditana (x =30).

3. La presencia de una pequeña placa frontal en V. l. abulensis (68%) y de pequeñas placas parietales (23%) es una característica destacable de la subespecie. En V. l. latastei este rasgo se observa en raras ocasiones (15%). V. l. gaditana presenta una fragmentación completa de las placas cefálicas en un 95% de los ejemplares.

Discusión: En 1977 Saint Girons describe Vipera latastei gaditana separando las víboras del sur de Andalucía y norte de Africa de las Vipera latastei del resto de la Península Ibérica. Estas otras poblaciones de víbora hocicuda, que abarcan la mayor parte de la Península Ibérica, se han incluido hasta la presente fecha dentro del grupo de Vipera latastei latastei.
En el libro FAUNA IBERICA (A.H.E.) Antonio Bea y Florentino Braña señalan un rango de escamas ventrales para Vipera l. latastei de 124 a 147, con una media de 140,6 (machos) y 141,6 (hembras). En este trabajo sobre Vipera l. latastei incluyeron varios ejemplares provenientes de la Sierra de Gredos, y esto explica el elevado número de escamas ventrales obtenido.
Nuestro estudio propone un número bastante inferior de escamas ventrales para Vipera latastei latastei (x = 136.2), asignando los valores elevados a Vipera latastei abulensis (x = 144), y los inferiores a Vipera latastei gaditana (x = 132.3).
La víbora hocicuda tiene una amplia distribución geográfica y no es extraño que aparezcan poblaciones con un grado de variación más o menos importante. Ya en 1968 Bernis había distinguido dos grupos geográficos entre las víboras hocicudas: El grupo levantino-meridional (Castellón, Teruel, Valencia, Cuenca, Jaén y Granada), de tono general claro y zigzag con bordes angulosos, y el grupo montano-occidental (Cáceres y montañas centrales), de tonalidad más oscura y dibujo dorsal de contornos redondeados. Aunque Bernis no hace mención al recuento de escamas, es asumible que su grupo montano-occidental pudiera asignarse a la nueva subespecie Vipera latastei abulensis, y que su grupo levantino-meridional fuera asignable a Vipera latastei latastei.
Los límites de distribución de V. l. abulensis no quedan definidos en este estudio, aunque hay lindes claramente acotables. Por el norte la subespecie queda restringida por campos de cultivo y pastoreo que se extienden desde la falda de la Cordillera Central hasta las primeras sierras de la provincia de Zamora. Por el este hay una estrecha franja entre las provincias de Avila y Madrid en la que la víbora hocicuda no está presente. Las citas de la Sierra de Guadarrama en Madrid y Segovia representan ejemplares de V. l. latastei.
En la vertiente sur de la Sierra de Gredos hay numerosas citas de víbora hocicuda. En el presente estudio se han estudiado 3 ejemplares provenientes de esa zona, que presentan un zigzag grueso y ondulado, característico de V. l. abulensis, no obstante el número de placas ventrales en dos de los ejemplares es muy inferior al promedio de placas ventrales en esta subespecie. En cualquier caso, si V. l. abulensis sobrepasa el eje de la cadena montañosa y se distribuye por la vertiente sur de Gredos, su límite de distribución se establecería a partir de las llanuras de las provincias de Toledo y Cáceres. Por la parte oeste de la Sierra de Gredos el límite de distribución de V. l. abulensis coincide con la terminación de la cordillera entre las provincias de Avila, Salamanca y Cáceres.

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